lunes, 21 de enero de 2013

“TE AMO, TE ODIO…ARSENAL FC”


Que mejor que comparar al entrenador Arsene Wenger o mejor al Arsenal de Inglaterra, con aquella famosa publicidad de Quilmes “Te amo, te odio” (http://www.youtube.com/watch?v=HlqQPdHjDdc&sns=em) tan real en el mundo del fútbol.  Y es que el Arsenal FC desde hace ya más de una década que por momentos enamora por completo, pero en otros te enferma. Es la perfecta forma de comprobar la delgada línea que existe entre el amor y el odio.

"Arsene... Who?" Titulaban varios periódicos británicos en su presentación


Una temporada después de la incorporación del gran Dennis Bergkamp al conjunto inglés, 1996/1997, llegaba al equipo un entrenador, desconocido por entonces, un tal Arsene Wenger, quien dirigía en Japón. Pocos, por no decir nadie, sabían que lo mejor para los “Gunners” estaba por venir.


Quinto en la temporada anterior y con entrenador nuevo, el Arsenal estuvo lejos de decepcionar, finalizó tercero pero con el mismo puntaje del segundo, el Newcastle United. Aunque su mayor éxito fue la prueba que Wenger tenía algo especial, además de buen ojo para las incorporaciones, llegaron dos jóvenes con un inmenso talento, ambos franceses, Patrick Vieira y Nicolas Anelka, quienes no tardarían en hacerse conocer por el mundo entero.


Para la temporada siguiente, llegaron el holandés Marc Overmars y el exquisito volante francés Emanuel Petit, otros grandes aciertos de Wenger. El Arsenal no gastaba mucho pero conseguía jugadores con un estado de forma excelente. Con Ian Wright lesionado, Anelka y Bergkamp se encargaron de guiar a los Gunners a un nuevo título de liga (no salia campeón desde la temporada 91), además de coronarse campeones de la FA Cup, conquistando un doblete histórico para el club.


Tan solo dos temporadas necesitó Wenger para llevar al Arsenal a lo más alto del fútbol británico, en la campaña siguiente quedó a tan solo una unidad de repetir el título de la liga, pero seguía sumando piezas claves. Esta vez el nigeriano Nwankwo Kanu y el sueco Fredrik Ljungberg. Hasta aquí tres temporadas, dos títulos, y seis grandes jugadores que se consagrarían como ídolos de los Gunners , descubiertos por él, nada mal Mister Arsene!!!


Luego vendría la consagración total, dos títulos más de la Premier League, incluida la del 2004 que finalizó sin conocer la derrota, otros 3 títulos de FA Cup y las incorporaciones de dos leyendas Gunners como lo son Thierry Henry y Robert Pires. El Arsenal de una vez por todas dejó atrás los años oscuros y se convirtió en el equipo de moda, el de mejor futbol, en el equipo modelo, no solo en Inglaterra sino en el mundo entero.


Pero como dice la canción…”todo tiene un final…todo termina” aquel lejano título de FA Cup de 2005 es el último campeonato del Arsenal en la era Wenger. Arsene equivoco los caminos, enloqueció con jugadores muy jóvenes con mucho “potencial” pero poca realidad, no los junto con verdaderos líderes, no se amoldo a las nuevas tácticas del fútbol mundial, vendió (el, junto a los directivos) mal… y compro peor. Errores que costaron caro para no volver a pelear el título de la Premier League que cada año se puso más competitiva.

El Arsenal era Henry, Bergkamp, Pires y cia...this is shit (!!!)

En el esquema de Wenger hubo cambios drásticos en las últimas temporadas,  y no hablamos de nombres sino de personalidad y rendimiento. De arqueros consagrados y con experiencia como Seaman o Lehmann a un Szczesny, de defensores centrales internacionales y fuertes como Campbell o Adams a Koscielny, de volantes como Vieira o Pires a Diaby o Ramsey y arriba como recambio, de un siempre cumplidor Wiltord a Chamakh.


Muchos dicen que le ha llegado la hora a Wenger y deberían de buscar a alguien con las mismas energías, dedicación y amor hacia “la orquesta sinfónica de Londres”. Lo cierto es que en algún momento del viaje algo se perdió,  la economía del club al parecer  está mucho mejor que aquellos primeros años de Arsene, pero fueron ya varios ciclos que terminaron sin poder despegar o alcanzar el éxito, los objetivos del club decayeron a prácticamente solo rondar en los puestos de clasificación a la Champions League y esta temporada 2012-2013 promete ser la peor de todas. Es el momento de que el Arsenal y más aun Wenger se encaminen nuevamente hacia los lugares que supieron llegar, apostar más por jugadores con presente y no tantas promesas, quienes blindados por el buen juego que impone el maestro francés sepan devolver a los “Gunners” al lugar que nunca debió dejar. 

!!!Cuanta magia en una solo foto!!!






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